En las últimas décadas, el papel activo de las mujeres en el sector inmobiliario ha venido en aumento, con una participación del 60% en la actualidad según datos de la Cámara Inmobiliaria Ecuatoriana. De hecho, se han convertido en una fuerza importante para el desarrollo de las actividades inmobiliarias.
El perfil de la mujer que desarrolla su actividad en el sector inmobiliario ha ido variando a lo largo del tiempo. Hasta ahora, el perfil más habitual eran aquellas mujeres de edad de entre 30 y 65 años y con un nivel de estudio medio.
Actualmente, cada vez son más las mujeres jóvenes con estudios superiores y especializados que deciden embarcarse en este tipo de actividad e iniciar su carrera profesional en el mercado inmobiliario o carreras afines. Pero, no son los únicos perfiles característicos que podemos encontrar; también, el sector inmobiliario ha dado la bienvenida a mujeres que buscaban reincorporarse en el mercado laboral tras haber interrumpido su carrera.
Según, Victoria León, corredora de bienes raíces “las mujeres destacan en este sector por tener las cualidades necesarias para entender a los clientes. Y es que su sensibilidad les ayuda a detectar qué buscan los compradores, interviniendo activamente en la toma de decisiones”.
Otros puntos destacados que aportan las mujeres en el sector inmobiliario son que, a menudo destacan en habilidades de comunicación y empatía, lo que es esencial en transacciones inmobiliarias donde la comprensión de las necesidades y preocupaciones de los clientes es fundamental; así también, suelen ser hábiles para construir redes y fomentar la colaboración. Esto es esencial en el sector inmobiliario, donde las relaciones y la cooperación pueden ser clave para el éxito en transacciones y desarrollo de proyectos.
Así también, Carolina Pastor, experta en el sector inmobiliario, afirma que “las mujeres tendemos a ser adaptables a las tendencias emergentes del mercado, como la digitalización y la sostenibilidad. Nuestra capacidad para abrazar y liderar iniciativas innovadoras contribuye a la evolución positiva de la industria; así como también, que la presencia de mujeres en roles de liderazgo y toma de decisiones promueve la equidad de género y la diversidad en el sector. Esto no solo beneficia a nuestro gremio, sino que también contribuye a un ambiente más inclusivo y dinámico”.
Cabe recalcar que, muchas mujeres en el sector inmobiliario participan activamente en programas de mentoría y desarrollo profesional para ayudar a otras mujeres a avanzar en sus carreras y superar barreras.
En conjunto, las mujeres aportan una riqueza de habilidades, experiencias y enfoques al sector inmobiliario, fortaleciendo la industria y contribuyendo a su evolución positiva. El reconocimiento y la promoción de la diversidad de género son esenciales para aprovechar plenamente el potencial de todas las personas en el campo inmobiliario. (I)